Principal

Diario YA


 

Análisis: ¿Por qué Osetia?


Jacobo Gadea. 10 de agosto

La noche del 7 al 8 de Agosto, las tropas georgianas atacan Osetia del Sur. La ofensiva comienza con el bombardeo de distintas poblaciones surosetias por parte del Ejército georgiano. Dichos bombardeos se llevan a cabo con los vehículos BM-21, unos sistemas múltiples de lanzamiento de cohetes de procedencia rusa, y los aviones Su-25, también de procedencia rusa. Si bien el bombardeo aéreo tiene una precisión muy buena en cuanto a la elección de objetivos, los cohetes terrestres, aunque mejorados sus sistemas, son muy imprecisos. En el bombardeo destruyen viviendas y matan alrededor de 1.500 civiles. Inmediatamente, las tropas terrestres georgianas inician un asalto a la capital surosetiana, Tsjinval, defendida por las paupérrimas tropas locales.

Como consecuencia de dicho ataque y de la nacionalidad rusa de las víctimas (el 90% de la población surosetia la tiene), el Ejército ruso manda refuerzos a sus tropas de paz para repeler la agresión georgiana. A su vez, se acusa a las Fuerzas rusas de bombardear con aviones Su-25 las ciudades de Gori y Poti, dentro de Georgia, extremo éste negado por el mando ruso. Según este mismo mando, el día 9 de agosto tropas del 58º Ejército y la 76ª División Aerotransportada rusas, además de las tropas de paz y de los voluntarios surosetianos y cosacos, consiguen derrotar al Ejército georgiano y hacerse con el control de Tsjinval.

Como balance de este combate, más de 2.000 civiles mueren por las armas georgianas y más de 30.000 surosetianos son refugiados en la vecina Osetia del Norte, dentro ya formalmente de la Federación Rusa.

Estos, hasta el momento, son los hechos objetivos de la nueva guerra caucásica. Pero ¿por qué se ha llegado a esta situación? Independientemente de las disputas históricas sobre esa región caucásica y de la protección secular rusa de Georgia contra las invasiones mongolas, persas y turcas, podemos ver unos antecedentes inmediatos.

Primero, durante la desintegración de la URSS se aceptó, como no podía ser de otra manera, la independencia casi total y la soberanía absoluta de Georgia con respecto a Rusia. Sin embargo, casi al mismo tiempo se negó la posibilidad de que Osetia del Sur, ya con un régimen autónomo especial dentro de la República Socialista Soviética de Georgia mientras aún existía la URSS, pudiese reintegrarse formalmente en el territorio de la Federación Rusa. Curiosamente, la región surosetia fue incluida en la Georgia soviética precisamente por la URSS, exactamente por Stalin.

Segundo, poco menos de una tercera parte del territorio surosetiano está habitada por pro-georgianos, siendo tanto así que se decidió que dicha sección la controlasen directamente los georgianos y la otra, la pro-rusa, fuese administrada autónomamente. Para garantizar la paz en la región, tropas de paz rusas y georgianas se establecieron entre los dos territorios. No obstante, durante los últimos años no ha dejado de haber quejas de un bando contra el otro sobre vuelos o derribos ilegales.

Tercero, la ambición occidental y su desprecio hacia Rusia, llevaron a proponer a Georgia, entre otros, como aspirante a miembro de la obsoleta OTAN (recordemos: la OTAN se creó para enfrentarse al Pacto de Varsovia y su existencia es anacrónica una vez desaparecido éste). También fue pública la intención noratlántica de colocar una parte del llamado “escudos contra misiles” precisamente en Georgia, en la misma frontera sur de Rusia.

Cuarto, las promesas occidentales a Georgia, especialmente por parte de EEUU, ha llevado al presidente Saakashvili a apoyar activamente la “cruzada” norteamericana en Irak: un contingente de 2.000 soldados forman parte de las tropas de la alianza en dicho país de medio oriente.

Y quinto, una de las condiciones necesarias para ingresar en la OTAN es la ausencia de conflictos territoriales internos, por lo que es probable que Saakashvili, en su ansia por entrar en el grupo, haya decidido perpetrar esta agresión contra Osetia del Sur, con un statu quo bastante estable, y provocar la muerte y el exilio de miles de personas.

 

Etiquetas:análisis